jueves, 12 de noviembre de 2009

Por los bigotes del 1 al 100, el placer mas vello... perdón bello.

Bueno, en principio ofrezco mis disculpas por no atender como se debe algo tan bacano como este blog, no voy a decir que estuve ocupado, porque no lo estuve, aunque debí hacerlo, pero en fin debo reiterar que el blog continúa, lo de las crónicas vanderghastianas está en veremos, y por lo pronto, me he ausentado porque no encuentro temas para darle vida y variedad al blog; escribir sobre relaciones de pareja es algo sencillo, porque a todos les interesa, y a todos les toca... el blog es por el momento sólo de cuentos, aunque quisiera extenderlo a otras cosas que me gustan como los videojuegos (para hacer reviews de los mismos), y la fotografía, incluso imágenes en general para mostrar, pero bueno... el día de hoy a lo que he vuelto.

Partiendo de la teoría en que el ser humano ha evolucionado junto con la vida terrestre a partir de un organismo unicelular y ha atravezado por incontables cambios en su forma, sus capacidades, y costumbres; no resulta de fácil comprensión como el hombre pudo evolucionar de tal forma que dejó de ser un cuadrúpedo a caminar en dos patas (piernas para quien se cree diferente a los demás seres de la tierra), encontró el fuego, pudo con ello consumir carne asada, lo cual a su vez, repercutió en el crecimiento de su cerebro, construyó herramientas, civilizaciones, calendarios que anuncian el fin de los tiempos, y demás... como este magnífico ser que por cambios en su organismo se deshizo del vello que cubría su cuerpo para protegerlo del frío y pudo adaptarlo de tal manera que el vello en la cabeza pasó a ser pelo (cabello para quien aún se cree animal) el cual se veía, y de hecho aún resulta atractivo para el sexo opuesto (o el similar para aquellos que provienen de los animales, al igual que todos, pero que para quienes ya no tienen patas, pero si cabello, resultan una abominación mas al género humano). Como es posible que este ser magnífico aun no haya podido deshacerse de algo que para la gente joven de la actualidad, o su mayoría, resulta en la mayoría de los casos en algo completa e injustamente inútil. el bigote.

Sucede que el bigote, no es algo que le sirva a los jóvenes en la actualidad, muy pocos lo lucen, por no decir ninguno, principal y básicamente porque al sexo de interés ya no le resulta atractivo. Esto resulta en un nacimiento de vello (aunque la Real academia española no considera un pelo de la barba como un vello) inútil en el rostro que perfectamente podría no salir, y solo sería extrañado por los alpinistas, la mayoría de nuestros padres, y uno que otro joven que lucha por encontrar un estilo propio. El bigote, como lo conocemos en la actualidad, posee una gran variedad de enemigos para su desgracia, el abuela de los mismos, guerrera por naturaleza, pero relegada al infortunio de la pobreza se hace llamar navaja. La mayor de sus hijas, la cuchilla permanece relegada, en la mayoría de los casos, a barberías y a salones de belleza. Aquel enemigo que pudo entrar en nuestros hogares se conoce como máquina de afeitar y está compuesta por las nietas de la navaja, e hijas de la cuchilla, en los casos mas extraordinarios es eléctrica y posee aloe vera para no dañar la piel. Los mas apetecidos son los rayos láser y las molificaciones genéticas con las cuales los hijos de la generación actual podrían quedar excentos del ya inútil bigote.

Entre toda la gama de enemigos que tiene el bigote, tuve que probar la gracia de tal vez el mas terrorífico de todos ellos, uno conocido pero ignorado, durante decenas de años inimaginado por los hombres, pero ya ven los sacrificios que hace uno para escribir entradas al blog... sin mas preámbulo, con ustedes, o conmigo. El depilador.

Nunca, en toda mi vida imaginé que algo pudiese causar tal dolor, no voy a decir que es lo peor, porque no lo es, pero en una escala de dolo de 1 a 100, ello estaría ubicado en un para nada denigrante 70 siendo el 69 para nada doloroso (bueno, depende...) y el 68 una inyección en el ombligo. Pues les puedo contar que este dolorcito punzante, está por encima del dolor de la picazón de los mosquitos a las 5 de la tarde en el paseo de la familia a hacer asado junto al río, y pegarse accidentalmente en el "huesito de la risa", para quienes han tenido la dicha de disfrutarlo.

La estilista, en este caso, mi novia, tuvo el mayor de los placeres, quitarme cada vello de mi bigote; un placer tal que si lo ubicáramos en una escala del 1 al 100... estaría orgullosamente ubicado en 10,000.

Todo comenzó con un, "intentemos... tu me quitas uno y yo te digo si me duele" el cual fue seguido de una palabrota que ubicada en la misma escala estaría mas allá del placer multiplicado por el dolor. Ya empezado el proceso, y "trasquilado" pues no hubo mas remedio que continuar, no sin antes preguntar "amor, ¿cuántos dolores crees que son?" y ella, sin saber aproximar muy bien responder "aproximadamente 100". En medio de los siguientes 500 o 600 dolores que le acompañaron, hubo lágrimas, lamentos, reconchas de la lora, hptazos, risas mezcladas con lágrimas y carcajadas con parecido a lamentos (como con el huesito de la risa), y algunas palabras nunca antes conocidas por el oído humano durante toda su evolución...

Finalmente, ya con dolor de cabeza y ganas de vomitar (lo digo realmente) decidí suspender el proceso cuando aún faltaban alrededor de unos 100 dolores (sino agonías) mas; obviamente estos últimos son casi imperceptibles por el ojo humano normal, y pueden esperar a otra sesión, por lo demás debo manifestar que esta práctica provoca una irritación igual o peor que la práctica de la máquina de afeitar con aloe vera, que entre otras cosas "supuestamente" no irrita la piel, pero para ser sinceros tampoco elimina el vello muy al raz, y por consiguiente, su uso diario resulta bastante fastidioso e irritante. Mas allá de los puntos rojos que han comenzado a salir en la parte superior de mi boca, y de los posibles problemas que esto conllevará el día de mañana, debo decir en resultados aún preliminares, que el resultado es muchísimo mas satisfactorio, pues no se observa ese delgado color verdoso que cuando se descuida se convierte en un horripilante bozo. Espero el día de mañana, aun no haya rastro de un principio de crecimiento del bigote, y el ardor haya desaparecido.

Para terminar, los invito queridos lectores a que practiquen esta emocionante y divertida aventura con sus parejas, no saben lo que se pierden !!!!!

Saludos, comenten ^^

2 comentarios:

  1. Amor!!! me has hecho reir mucho jajajajajajaja, no habia una mejor manera de describir lo ocurrido que como lo has hecho, solo te equivocaste en una frase y en la que dices q mi placer fue de 10000 :O, noooo a mi tambien me dolieron cada pelito que amenamente retire te tu bozo, ^^ ahora, el resultado a mi me gustó ya no tienes el verdesito, ya sabes cuando estes listo retiramos los que aún están vigentes!

    Te amoo!!!

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  2. jajaja .... mas niña, yo lo he estado haciendo desde ke me dijo normal ahi de a pokitos cada dia ..... jajajaja

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