miércoles, 9 de septiembre de 2009

El vagabundo y su muñeca de porcelana con ojos que le matan.

En un pueblito viejo, de casas pequeñitas, y de calles muy tranquilas un día un vagabundo encontró una hermosa muñeca de porcelana, elegante, inteligente, y sencilla, la cual tenía unos ojos muy lindos, más que los ojos, su mirada, la cual era especial, coqueta y dulce. Esos ojos tan lindos "lo mataron", por lo cual el vagabundo decidió bautizarla "muñeca de porcelana con ojos que me matan". Esta muñeca tenía un don especial para hacer la vida más agradable, y en las noches, cuando ya el pueblito estaba en silencio absoluto, la muñeca le hablaba al vagabundo, le contaba con su suave voz todas las cosas que había vivido y los lugares en los que había estado, la muñeca provenía de una fábrica ubicada muy hacia el norte del país donde vivía el vagabundo, la cultura de allí era muy diferente, cosa que hacía muy especial la experiencia para el vagabundo que nunca antes había conocido a nadie de aquel lugar. La voz de la muñeca de porcelana era tan cálida que en más de una ocasión logró que el vagabundo cayera en un profundo sueño, mágico y delicioso, que lo hacía muy feliz.

Pasaba el tiempo, y la vida del vagabundo tomaba un buen color gracias a la compañía de su muñeca de porcelana, tanto así que logró conseguir una estabilidad y dejó de ser vagabundo, ella era su única compañía, o por lo menos era aquella incondicional con quien sabía que siempre que llegase a su casa, estaría para él, con un agradable gesto en su rostro, y esa mirada, que parecía retratada de la más hermosa diosa del universo.

El ex-vagabundo, ahora convertido en un caballero lleno de prosperidad, consiguió un trabajo en la gran ciudad, una que le ofrecía mayores ventajas que aquel pueblito en el que había conocido a su dulce muñeca de porcelana, y sin pensarlo dos veces, salió de allí, dejando a su muñeca empacada en una cajita con su nombre, y con la palabra "frágil" escrita en la parte superior. Al conseguir un nuevo hogar, y establecerse en su nueva realidad, el ex-vagabundo y ahora caballero pudo volver a estar con su muñeca, tan elegante, inteligente, sencilla y especial, como podía ser.

La ciudad, como casi todas las ciudades, tenía cosas maravillosas que el ex-vagabundo y ahora caballero jamás había disfrutado, y lo atrajo, lo sedujo con sus encantos como serpiente a su presa, el ex-vagabundo y caballero se dejó cegar por las cosas simples y vacías que la ciudad le ofrecía, y dejó de ser especial con su muñeca de porcelana, ya no le prestaba la atención que necesitaba, ni se preocupaba por quitarle el polvo que caía sobre su frágil figura, ya casi no le hablaba, y prefería pasar el tiempo inconscientemente en aquello que “llenaba” su vida de alegría, y que estúpidamente pensaba, agradaba y hacía feliz a su muñeca de porcelana.

El tiempo, infinito e inexistente, permaneció contando los segundos, días e incluso un año al parecer pasó, hasta que un día el ex – vagabundo, cada día más vagabundo, inconscientemente rompió su muñeca de porcelana, la cual se deshizo en mil pedazos. Cegado completamente, no cayó en cuenta de su muñeca destruida, y continuó su vida, mientras la muñequita, derramaba sus últimas lágrimas de dolor por la ausencia del vagabundo que una vez conoció.

Unos meses o al parecer un año después, el ex – vagabundo, muy cercano a lo que una vez fue, echó de menos a su muñeca de porcelana, y mientras la recordaba, decidió ser especial con ella, de tal manera que se arregló lo mejor que pudo, le compró un detalle, y fue decidido a recordar los viejos tiempos en que pasaba las noches hablando con su muñeca, pero al llegar a su casa, notó que la muñeca no estaba, y observó los pedazos en el suelo, la cabeza de su muñequita de porcelana yacía en el piso con una mancha, roja como sangre, de la última lagrima que había dejado caer la muñeca cuando sin quererlo el ex – vagabundo, que ahora intentaba rehabilitarse, la había destruido.

El vagabundo se sintió muy triste, y quiso repararla, de tal forma que buscó todos los pedacitos que encontró en el suelo, e intentó unirlos para alzar nuevamente la figura elegante y hermosa de su muñeca de porcelana, pero había fragmentos que no encontraba, y sin darle la importancia del caso, siguió con su prisa por armarla como fuera, y lo consiguió. Algo extraño sucedía, la muñeca no hablaba, la mancha en su rostro no se desvanecía por más que el ex – vagabundo intentaba, los fragmentos no encajaban correctamente por mas presión que se les ejercía, y lo peor de todo, es que no podía encontrar los ojos de la muñeca, aquellos ojos dulces y coquetos, que le robaban el aliento, que lo dejaban sin vida.

La felicidad del ex – vagabundo se fue en picada hacia el olvido, la tristeza y la soledad acompañaban sus días, mientras recordaba los buenos momentos que había pasado con su muñeca. Intentaba distraerse con aquellas cosas que tanto le agradaban, que aún inconsciente de que por ellas había destruido a su preciada muñeca, esperaba lo “llenaran” como alguna vez pareció suceder. Un día, entendió que había cometido un gran error al fijarse en esas cosas mundanas que ya no lo satisfacían, y por poco perdió la cordura, volvió a ser un vagabundo, y en medio de su tristeza entendió que tenía dos opciones, continuar con su vida en ausencia de su muñeca con el dolor que esto le producía, - pues es lo que la gente está habituada a hacer, se dijo a sí mismo, - después de todo no sería ni el primero ni el último en perder una muñeca de porcelana, elegante, inteligente, y sencilla, que le hablaba, y que tenía ojos que lo mataban…

Nadie supo jamás que aconteció con el vagabundo, alguien dijo que al parecer los ojos de la muñeca lo mataron, alguien mas dijo que se volvió loco, después de todo, hay que reconocer que esas muñecas no se encuentran en cada esquina, y mucho menos una elegante, inteligente, y sencilla, que hablara, y con ojos dulces y coquetos, que mataban. Una persona dijo que al parecer la muñeca que venía en la caja desde el pueblito no era la misma. También hay rumores en las calles de la gran ciudad en los cuales se habla de una silueta oscura, que en las noches deambula con lentitud, cuidando los pasos que da, se dice que en su mano derecha sostiene una muñeca de porcelana a la cual le falta un solo fragmento, unos ojos que matan, pues entre todos los fragmentos que ha encontrado, ninguno entra a presión en la muñeca, pues sólo un fragmento puede entrar y es aquel que la muñeca permita. La lentitud de sus pasos es porque ha pasado su vida entera buscando recuperar ese fragmento que se le ha perdido. También se dice, que la muñeca está viva, y que el vagabundo tiene el fragmento de los ojos que matan en la mano izquierda, pero la muñeca no le permite que encajen, según los rumores, porque la muñeca ya no siente que deba hacerlo, pues se dice que si se permanece en total silencio, se puede escuchar levemente a la muñeca decir… ya no te amo.

7 comentarios:

  1. Danielito!!! marik!!!! me deja sin palabras!!! sin siquiera un suspiro!!!! no se q decir!!!

    Att: Javier!!!

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  2. Buenoooo, cuento muy bonito, lastima que como todo "vagabundo" y como dice la canción: "no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde"; ojalá y en verdad exista solución para todo en la vida menos para la muerte, y en este caso el vagabundo puda hallar nuevamente a su muñeca de ojos matadores. jejeje eso espero!!

    Att:Angela

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  3. A MI MI ME PARECE UN CUENTO INTERESANTE PERO...COMO TODO...NOS ESTA CONTANDO UN RESUMEN DE LO QUE YA SABEMOS, ADEMAS ESE CUENTO DE LA MUÑECA DE PORCELANA VIENE ES DE LA COSTA..Y YA LO HE ESCUCHADO BASTANTE EN LA MUSICA VALLENATA.ME QUEDA POR ACLARAR ALGO..COMO NO SE PUDO DAR CUENTA QUE ESTABA ROTA? ACASO ES QUE ESTABA CIEGO O QUE Y NO ME SALGA CON RESPUESTAS COMO TAL VEZ O ALGO ASI, ..QUE VAGABUNDO DE VERDAD¡¡¡

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  4. Primero que todo queridos lectores, no me griten. Segundo, el cuento me lo he inventado, y la palabra también, así que no pueden dudar de la autenticidad del mismo, yo no tengo la culpa que alguien más tenga una muñeca de porcelana, el caso es, que se ha roto porque el vagabundo es un &%$#

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  5. Muchacho, lo prometido es deuda: Genial!!, bastante cierto la verdad, lastima por la muñeca... me la habia imaginado bien bonita XD.

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  6. Excelente... siempre he dicho que tienes talento... pa lante como el elefente dani un abrazo :)

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  7. Genial!!!! de verdad que buena historia me encanto ojala tuviera esa facilidad de hacer de mi vida una linda historia... Deverdad wauuuu!!!!

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